Hace tiempo que veo
ese placer escondido que se oculta bajo sus ojos y que promete con su mirada. Ésa que sabe interpretar lo que le pide la mía. Ésa que me hace echar de menos saber cuál es la decisión correcta y sentirme fuerte, independiente, segura de mí misma.
Sabía que él vería
el brillo de pasión en mis ojos. Hondo, muy hondo, y tanto tiempo escondido.
Pidiendo a gritos salir a flote. Pidiendo a gritos que le deje tocarme, que me
deje llevar, que me deje sentir… Vibrar de placer bajo sus manos...